Media Maratón de Almansa

              Bueno amigos, finalizó mi última media de esta temporada, media que hacía la nº 134 de mi ranking personal, ahora si no hay ningún imprevisto que se ponga a tiro, hasta la media de Alicante a principios de octubre no volveré a correr la distancia, me dedicaré a las carreras mas pequeñas a ver si puedo hacer descansar mis castigadas piernas un poco.

              Mi temporada “oficial” comienza siempre a principios de octubre y finaliza con la media de Almansa, lo que ocurre es que en el verano siempre caen algunas carreras cortas para no perder la costumbre de “competir”.

              En la presente temporada han “caído” 2 maratones, 15 medias maratones, 1 vuelta a la foia (28), 1 vía verde Maigmó-Agost (23), 6 crosses de 10 Km. y 7 pruebas mas cortas, unos 1.200 Km. “oficiales” sin contar evidentemente los entrenos y las trotadas que han sumado según mis anotaciones otros 2.000 Km. aproximadamente ya que he tenido que preparar los dos maratones.

              Bueno, pues con estos mas de 3.200 km desde octubre creo que voy bien servido, y precisamente ayer en esta prueba mi gemelo derecho dijo basta, pero contemos los hechos cronológicamente que es como se cuentan las cosas.

              El viaje en esta ocasión lo hice acompañando a  mis buenos amigos Héctor y su hermano Efrén, y como no, a la simpatiquísima Reme esposa de este último, me ofrecieron acompañarles y con mucho gusto acepté su ofrecimiento, mi amigo Alberto también me lo puso en bandeja, y es que esto es lo que ocurre cuando se tienen amigos. El viaje tanto de ida como de vuelta fue genial y muy ameno, y es que con esta gente se puede ir a la luna.

              Llegábamos sobre las cinco de la tarde, hora taurina por excelencia y lo primero que hice fue localizar telefónicamente a mi amigo Alberto con el fin de entregarle de una vez por todas mi regalo, que como recordareis de las pasadas entradas consistía en unas sombrillas de repuesto. Una vez localizado procedí a su entrega inmortalizando lógicamente el momento para que después no diga “a mi nunca me has regalado nada” que de estos tipos se puede esperar cualquier cosa, testigo de todo fue el gran Fausto, que con el brazo en cabestrillo fue el encargado de ejercer de reportero gráfico, a continuación recogida del dorsal y olvido de entregar el chip que venía en el sobre.

Momento de la entrega del regalo.click en la foto para ampliar.

Policía protegiéndose de la "nevada". click en la foto para ampliar.

Mis compañeros de viaje.click en la foto para ampliar.

Buén grupete.click en la foto para ampliar.

              Como siempre la alegría de saludar a los amigos, Fausto, Juan Fran, Pascual, Jesús  Paredes y su padre, Rafa, que se pegó una tunda de kilómetros para no correr ya que está en el dique seco, Oskar, sin su guapa correbirrera personal Pilar, Antonio Sánchez, José Antonio Vicente, Javi y su esposa Pepi, etc.

Como se fabrica un payaso. click en la foto para ampliar.

Javi y Pepi. click en la foto para ampliar.

Fausto con su cabestrillo y Oskar.click en la foto para ampliar.

              En esos momentos hacía sol y calor, pero estaban cayendo de los árboles una especie de copos de nieve que venían de cine para los que padecen alergias, tan es así que hasta los policías y los miembros de protección civil iban provistos de mascarillas para poder respirar sin problemas. Una vez cambiados y dispuestos para la carrera me acuerdo de que no he entregado el chip que venía en el sobre y carrerita a devolverlo  antes de la salida, me junto como siempre en la cola del pelotón con Maite y Alberto y les comento que las nubes que se acercan por el horizonte no me gustan un pelo, decidimos salir en esa posición para no perder la costumbre, se da la salida y pasamos por el arco transcurridos tres minutos aproximadamente desde el disparo, trote cochinero haciendo fotos y alrededor del Km. 2 vemos al bueno de Fausto parado en el arcén, las molestias de su brazo en cabestrillo no le dejan continuar y decide con muy buen criterio dejarlo para otra ocasión, un poco mas adelante nos alcanza la incombustible Julia, mi compañera en la bajada Maigmó-Agost, se une a nosotros y decide que esa será su marcha en esta carrera y en nuestra compañía, un placer.

              En el Km. cinco aproximadamente veo como me intenta rebasar un corredor sin dorsal y sin reloj, no es otro de Paquito Bravo, al saludarlo se percata de nuestra presencia y decide quedarse también en nuestra compañía a pesar de que es un corredorazo como la copa de un pino, baste decir que el pasado fin de semana corrió los 101 Km. de ronda en 13 horitas con sus respectivos avituallamientos, nos comenta que debido a un problema de última hora no ha podido llegar a tiempo a la salida, se ha colocado su chip personal, ha mandado a su esposa a recoger el dorsal y la bolsa y ha quedado con ella en que se lo colocará pasada la primera vuelta, le ha preguntado a un policía a la salida por la carrera y le ha dicho que hacía siete u ocho minutos que había salido, pues bueno, ya les alcanzaré, este tío también en otro genio.

Paquito Bravo sin dorsal.click en la foto para ampliar.

              Alberto nos comenta que cuando pasemos por el km. 10 se adelantará y que nos veremos privados de su compañía, lo entendemos, dicho y hecho, pasamos la pancarta de salida y nos dice amablemente adiós, unos metros mas adelante me da un pinchazo el gemelo derecho que me deja medio averiado, llevo unas medias opresoras colocadas y creo que eso me hace que el dolor en esos momentos sea soportable, se lo comento a Paco y a Julia e intento adecuar mi zancada en una distancia que me sea cómoda y que no me moleste mucho, debería de haberme parado, jamás me había ocurrido una cosa semejante, les indico a mis compañeros de fatigas que se marchen que ya acabaré como pueda, no he abandonado jamás y no lo haré si puedo evitarlo en esta ocasión, me contestan negativamente sin dudarlo.

Julia con sus payasos.click en la foto para ampliar.

              En el Km. diez y medio aproximadamente, las nubes que a la salida nos amenazaban deciden que no han venido a Almansa a ver la carrera y se ponen a jarrear agua por un tubo, junto con el viento que se ha vuelto hacen la carrera muy, pero que muy molesta, nos acompaña durante unos dos kilómetros, después continua lloviendo pero ya algo mas débilmente, yo no solo continúo con mis molestias, se van acrecentando por momentos y me hace pensar muy seriamente bajarme del caballo, de nuevo encuentro otra zancada aún mas corta y con ella el dolor es mas soportable, pienso que si Fausto ha hecho a mi entender bien al pararse que coño hago yo en carrera, para de llover durante unos Km. y da una tregua que da tiempo casi a secarse la ropa, esos kilómetros ya los estoy haciendo a 6 minutos aproximadamente, cada vez me duele mas, pero pienso que llegar a la meta andando será casi mas duro que finalizar como pueda, las calles se van despoblando y es una pena porque Almansa es una localidad en donde se vive mucho la carrera y el público anima en casi todas las calles, pero claro hay que estar tonto para quedarse en esas condiciones.

              El recorrido es algo más suave que las ediciones anteriores, pero no mucho mas, han quitado una cuesta prolongada que se pasaba dos veces, pero continúa siendo una prueba para mi, durilla.

              En el kilómetro dieciocho sale un precioso arco iris que nos llena de alegría, pero al contrario de toda lógica es salir el fenómeno atmosférico y comenzar a jarrear agua de nuevo, esto con Franco no pasaba, el arco iris cumplía fielmente con su función, jajajajajaja.

              Este agua nos acompañaría ya hasta el final, mi dolor en aumento, las calles desiertas, el público corriendo, las vallas y los adornos de la llegada los estaban recogiendo, los equipos megafónicos en silencio, ya me diréis si esto es una llegada ideal, saludo a la guapísima esposa de Paquito, le doy dos besazos a Julia y cada mochuelo a su olivo, ni cerveza, ni coca cola, ni por supuesto “apañao con torreznos”, apañao estaba yo, ya no corro hacia el coche donde supongo me esperan Reme, Héctor y Efrén, ya que mas me da si voy chorreando y además mi gemelo me da las gracias por no forzarlo más, voy cojeando sensiblemente y pienso en los días sucesivos, tenía la subida al castillo de Santa Bárbara programada pero solo pensarlo me da grima, llego al coche, me cambio de ropa y de zapatillas (siempre llevo un repuesto) y pa la casa.

              Nos acompañan durante el camino de regreso una gran cantidad de relámpagos pero ya estamos a cubierto, a la llegada a casa parecía el cojo de Marchena, no podía ni apoyar el pié.

              Hoy me ha remitido bastante el dolor y eso me llena de alegría ya que tengo pagada la inscripción del cross de Carrús y de los 10 Km. de Alcoy a donde espero llegar en condiciones dignas.

              Evidentemente el reportaje fotográfico a partir de fatídico Km. 10 brilla por su ausencia, solo con mantenerme en pié y con resguardar la cámara del aguacero ya he tenido bastante.

              Mi garmin me ha dado una distancia de 21.140 metros y los he recorrido en un tiempo de 2 04’ 40’’ a una media de 5’ 54’’  y 129 pulsaciones de media y gracias, la participación, pués mas pobre que otros años, yo le calcularía unos 1000 corredores menos, la bolsa del corredor cada año mas triste, este, solo calcetines y una feísima camiseta blanca, creo que con estos argumentos esta media irá perdiendo poco a poco participación y eso que es una de las mas animadas y de las que todos teniamos en el calendario.

              Ahora a descansar dos semanitas a ver si para el próximo día tres de junio puedo estar disponible para Elche, un saludo amigos.

Foto de la semana:

En la presente instatánea podemos comprobar como la genial corredora Encarni Fonseca no duda en imponer su ley ante las sufridas compañeras de batalla, durante las pruebas no les permite ni el más mínimo gesto de indisciplina. click en la foto para ampliar.


Enlace de fotos

Fotos Alberto el sombrilla