lunes, 20 de febrero de 2012

Maraton de Sevilla

              Bueno, bueno, bueno, pues ya está pasado el 2º maratón, esto es un no parar, jajajajaja. Llegábamos a Sevilla sobre las 6 de la tarde del viernes, Alberto, Maite y un servidor, solo hicimos el viaje los tres porque mi mujer no nos pudo acompañar debido a unos problemas familiares, ¡¡ y yo por los pelos!!! Salíamos sobre las 11’30 de la mañana, yo prácticamente desde el hospital a la carretera, el jueves tuve un día completito en el centro hospitalario con mi madre, me mamé 14 horas de plantón en el pasillo mientras la atendían, a las tres de la madrugada llegaba yo a mi casa, y eso le pasó una factura tremenda a mi escoliosis y a mi espina bífida.
              También tengo que decir que en las últimas tres semanas el entrenamiento que he tenido ha sido mínimo por no decir nulo, ¡¡¡ ya vendrán tiempos mejores!!! Bueno, pues llegamos a Sevilla tras una animada charla los tres y no dirigimos al estadio olímpico a recoger los dorsales, poca gente había en el recinto, al parecer los corredores locales ya los habían retirado a lo largo del día y los foráneos estaban por llegar, una pequeña cola y a por la bolsa del corredor, ya tenemos la primera, no hay camisetas de mi talla, ¡¡¡ no puede ser!!! solo tengo una camiseta de un maratón, y la segunda que consigo y que además es de buena calidad me viene justita, dicho esto con toda la generosidad posible hacia mi esbelto cuerpo, Alberto ve una zapatillas Mizuno que llevaba intentando localizar desde hace algún tiempo y se lanza como un poseso hacia ellas, pero los dioses hoy no están de su parte, no le vienen, me las pruebo yo y que ni pintadas, bueno, y ahora que hago, pues como está a un precio asumible, pa la saca, regresamos al centro y localizamos el hotel, céntrico a más no poder, ¡¡¡que bueno!!! no, que bueno no, no tiene aparcamiento, casi una hora nos cuesta encontrar un aparcamiento, claro que tenemos que claudicar en un aparcamiento público al final, así cualquiera, unos pequeños paseos, cena y para el hotel a descansar.
              El sábado a las 8’30 horas salimos a estirar las piernas por Sevilla en un ligero entreno durante media horita y nos duchamos, después tienen el gran gesto de acompañarme en una tremenda caminata por la ciudad mostrándome los mas conocido de ella, yo no estaba en Sevilla desde el año 1980, y solo estuve un día por lo que todo era para  mí prácticamente nuevo, nueva visita a la feria del corredor en donde vimos por fin a alguien conocido, Abraham estaba en la cola para recoger la bolsa, comida de la pasta al mediodía en donde unos corredores locales nos ofrecen choricitos y queso que han traído por si esta era demasiado liviana y a descansar al hotel, yo no duermo, me tengo que cargar en una diminuta televisión el programa de la Campos y su entrevista al preso mas antiguo de España, al parecer los nulos nervios que había tenido durante las fechas previas estaban haciendo su aparición, los nervios y el dolor lumbar que intenté combatir con el consabido Ibuprofeno, a estas alturas ya comienzo a pensar si lo podré contener con medicación y no habré hecho el viaje en balde. Nos “despertamos” y de nuevo a pasear por el centro en donde nos encontramos al bueno de Paquito Bravo con su bellísima esposa que se dirigen a comer unos churritos con chocolate, charlamos un poco de la carrera lógicamente, una ligera cena y de nuevo al hotel, no consigo conciliar el sueño al principio y me preparo todo para el domingo, al final caigo de maduro como los higos, el estrés hospitalario y el cansancio hacen mella en mí.
              Y llega el gran día, 6’45 no toca el despertador y no toca porque lo he parado yo antes, algunos corredores que también se hospedan en el hotel al parecer están más nerviosos que yo y están haciendo ruido por el pasillo a las 6 de la mañana, desayuno y para la carrera.


Con el gran Manolo Rico. click en la foto para ampliar.


Minutos antes de la carrera. click en la foto para ampliar


Con Paquito mi murciano favorito.click en la foto para ampliar.


Con Carlos, hermano de Fer de Panamá el ilustre bloguero y amigo, es evidente su familiaridad porque tienen el mismo cuerpo los dós.click en la foto para ampliar

              Hace fresco a esas horas en Sevilla pero el cielo totalmente azul hace presagiar una mañana totalmente soleada, espléndida y muy probablemente calurosa para correr. En efecto a mitad de la carrera algunos termómetros situados en paneles en el centro de la calzada marcaban 22º.
              Nos introducimos en las entrañas del estadio, dejamos en el guardarropa los enseres y mientras combatimos el frasquete que hace en el interior de los pasillos con unos livianos saltitos se incorpora con nosotros Paquito Bravo, viene sin cronómetro, prueba evidente del pensamiento que le invade sobre la prueba, por sensaciones, a lo que salga, también llega Fausto, coño, que alegría me llevo, salimos hacia la pista y allí y alrededor de la conocida bandera Albertina nos vamos uniendo conocidos, llega Paquito, mi murciano favorito con su impoluta camiseta Sevillana de estreno algo entalladita para mi gusto, Gaby, con la cara hecha un auténtico poema, casi irreconocible, Manolo Rico, alias Groucho Marx, guapísimo con un tremendo cohíba entre sus labios, a este le prometo que si acabo en condiciones me apunto a la de Ceutí y desde estas líneas se lo corroboro, también se une a nosotros Carlos, el  hermano gallego de el gran Fer de Panamá, que conocía anteriormente a Alberto (y quién no conoce a este) y como no, también se nos unieron los gentiles donantes del choricito del día anterior.
              Salimos en los últimos lugares, Alberto, Maite, que solo pretendía hacer 10 kilómetros y yo, solo nos cubre las espaldas el equipo médico con las ambulancias, cuando estamos corriendo por La Cartuja en los primeros cinco kilómetros nos cruzamos con Abraham que nos saluda amablemente, nosotros a lo nuestro, Alberto ya me ha advertido que su gemelo izquierdo no le hará demasiadas concesiones a poco que lo fuerce, yo intentando que el ibuprofeno que me he desayunado cumpla ya con su misión y mi espalda me deje tranquilo, sobre el Km. 8 noto un poco cargado mi gemelo izquierdo y pienso “ que coño pasa aquí, si era a él al que le dolía” y entonces le pregunto por si me lo hubiese traspasado en un hábil truco de magia, no me lo nombres me dice, que está dándome que hacer, pero voy a intentar olvidarme de él, madre mía, pues vaya día que nos espera, a principios de carrera y ya estamos los dos con quejas, yo se que Alberto la finalizará sin problemas, faltaría más, pero de mi no estoy tan seguro, sobre todo por lo que falta aún por recorrer.
              Intento hacerle caso y quiero olvidarme del mio, una pequeña ráfaga de chistes que se saca de la manga y que causan un jolgorio generalizado cumplen ampliamente con la misión de hacerme olvidar las molestias. A estas alturas la medicación está cumpliendo su misión y la espalda solo me molesta ligerísimamente, en el Km. 20 mis piernas comienzan a recordarme que no he entrenado durante las tres últimas semanas y las ligeras molestias se me van alternando por diversas partes de las mismas, esto me alivia ya que pienso que si no se paran en ninguna en concreto todo irá bien. Nueva pregunta por mi parte hacia sus dolores, estar, lo que se dice estar, están, ¡¡¡ y los míos, no te jodes!!! pues vamos a intentar llevar un ritmo acompasado sin movimientos bruscos a ver si llegamos bien, en efecto, dicho y hecho, hemos pasado bastantes kilómetros en el mismo segundo, increíble, el 23 a 6’ 8’’, el 28, 29 y 30 a 6’ 9’’, no diréis que no es técnica esto, bueno, pues segundo arriba o segundo abajo ha transcurrido toda la carrera hasta el Km. 35, a partir de ese momento nos iban cayendo unos cuatro o cinco segundos por km, que tampoco era para ponerse a llorar, pero caían. Al paso por el puente de la Barqueta y coincidiendo con el Km. 38 y una vez que tenía segura mi llegada, ha comenzado a aflorar mi estrés hospitalario, la falta de entrenamiento en las semanas anteriores y las pocas series de “abominables” y lumbares  que he hecho, la nula presencia de público a la entrada a la Cartuja, la cercana presencia del estadio pero al que nunca llegábamos ha estado a punto de desmotivarme ligeramente, entonces le he dicho a Alberto que echaba de menos para este último arreón mi mp3,  “eso está resuelto me dice” y comienza a cantar, no por Dios, no puedo soportarlo, esto es lo peor que me podía suceder, ahora es cuando verdaderamente quiero acabar y acelero la marcha, de hecho el último kilómetro ha sido el más veloz de toda la carrera. La entrada al estadio…. pues si recuerdas la de nuestro Abel Antón, inenarrable, lo que pasa es que hay que hacer un grandísimo esfuerzo de imaginación para llenar las gradas del mismo, el tartán de la pista tremendamente deteriorado en una clara evidencia del ostracismo a que está sometido, ya estamos llegando a meta, de nuevo soy finisher, sin ninguna parada, genial, entramos de la mano, sobre todo porque ya me ha advertido que será la última en la que me sirva de guía, a partir de ahora me toca a mí buscarme la vida como a un poyuelo, solo me resta darle las GRACIAS, su experiencia me ha sido vital en mis dos primeras maratones, si a partir de ahora no soy capaz de ir por mi cuenta no mereceré haber sido su alumno. Paramos el crono en 4  19  43, tiempo real igualando prácticamente la marca de Valencia, no está el horno para historias de momento.
              La organización ha sido excelente, los avituallamientos muy completos con acurius, agua, naranja y esponjas cada dos kilómetros y medio, las comidas que nos han dado han estado muy bien, sentaditos en mesas y amenizados por el grupo musical Los Centellas, padres de la nueva versión de El Toro Enamorao de la Luna, solo el lunar de las camisetas, que el primer día ya habían acabado con el tallaje más holgadito.
              La semana próxima si no ocurre nada raro me incorporaré de nuevo a la ruta en Torrevieja en donde espero ver a la casi totalidad de mis amigos y la próxima carrera de “hombre” será en Ceutí, se lo debo al gran Manolo Rico, un saludo a todos amigos.


Foto de la carrera:


En la presente instantanea podemos ver a nuestro genial compañero de fatigas Abraham Pastor, veloz donde los haya y genial persona haciendo estiramientos propios de su talento, pasa por ser uno de los más guapos del pelotón y se lo rifan algunas de las corredoras, no es de extrañar con el body que se marca el tío. click en la foto para ampliar.





10 comentarios:

  1. Mariconazoooo!!! Ya sabia yo que de esta no me libraba jejej,menudo tandem formas con Alberto que peligro,me alegro que finalizaras con exito tus segundos 42.195mts quiza tambien nos veamos en el proximo no descarto ir a Ceuti.Un abrazo

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  2. Enhorabuena Jose por tu segunda maratón. Ya me explicarás como se puede correr una maratón y que te vayan contando chistes jejeje. Espero las molestias de la espalda estés mejor y por supuesto que tu madre se encuentre bien y los problemas familiares que impidieron a tu mujer acompañarte se solucionen de la mejor manera. Seguro que vendrán tiempos mejores. Un abrazo maratoniano!!!!

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  3. Felicidades por tu segunda marathón, y encima con los compañeros Paco, Maite , Alberto, etc.
    Saludos

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  4. felicidades campeón, si ya estas pensando en la maraton ceuti, es porque terminaste bien.
    un abrazo y nos vemos en torrevieja.

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  5. Enhorabuena, otra a la saca y como a ti me paso a mi, con muy poco entreno acabarla tiene su merito. Los ultimos kms se hacen interminables, pero como dijo nosequien, no hay 2 sin 3. Un saludico.

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  6. Enhorabuena Jose, me alegro que conocieras a mi hermano, igualito en el físico jajaja, la verdad que no lo tuviste nada fácil con todas esas circunstancias previas, pero el buen humor y las ganas superaron todo. Muchas gracias por las fotos, ya le aviso a mi hermano para que se pase por acá. Abrazos y ánimo, a recuperar y a por la tercera, FER

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    1. Te digo lo mimso que a Paco, dos maratones en tres meses...Uff, que máquinas. Y además, con todas las circunstancias que han rodeado este, que iguales tiempos, es para estar muy contento a nivel deportivo. Espero verte en Torrevieja

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  7. Muy buena crónica JV, como nos tienes acostumbrados.
    Ahora a por la tercera para igualar a tu escudero.
    Un placer el compartir tanto los Kms por las calles de Sevilla, como en el asfalto de las carreteras en el viaje.
    Seguiremos haciendo Kms.
    Un abrazo

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  8. Enhorabuena por tu segunda, que es la más difícil. El problema es que ahora ya no podrás parar y tendrás que seguir corriendo maratones el resto de tu vida...

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  9. Jose vicente , enhorabuena macho , perdon por llega tan tarde a comentarte ,he estao , ocupao . Te veo en torrevieja super maratoniano , a ver si te animas y te vienes a madrid , un abrazo

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