Media Almansa 2011

              Bueno, pues el pasado sábado corrí la Media de Almansa finalmente, carrera en la que observé algunos cambios con respecto al año pasado, en primer lugar fue la nueva ubicación de las listas y entrega de dorsales, que se realizó en los bajos del nuevo estadio de atletismo, bastante cómodo, sin sol ni calor y con listas bien colocadas por iniciales, también la entrega de dorsales fue bastante rápida, así como la entrega de la bolsa del corredor, que también cayo en nuestra manos antes de inicio de la prueba, esto lo valoro positivamente ya que el volumen que está adquiriendo esta prueba hace necesaria la adecuación de algunas actividades para dar mayor fluidez y rapidez a estos trámites.

              Se guardó un rigurosísimo minuto de silencio por las victimas de Lorca, por parte tanto de corredores como de público en general.

              En cuanto a la carrera propiamente dicha, opté por la occión que estoy poniendo en práctica últimamente, es decir, salir a divertirme, si se puede uno divertir corriendo 21 kilómetros, intenté en todo momento no sufrir en absoluto ya que este año (que para mi comenzó a primeros de octubre) ya he corrido 12 medias maratones, una carrera de 22 kilómetros y 10 carreras mas de otras distancias además de sus entrenos semanales correspondientes, por lo que a partir de ahora y durante el verano me dedicaré a correr alguna pequeña carrera intentando dejar descansar en lo que pueda a mi maltrecha espalda y a mi dolorosa osteocondritis en el tobillo izquierdo.

              El recorrido, que todos conocemos sobradamente y que no ha cambiado se me hizo bastante llevadero, a pesar de que lo considero uno de los mas sufridos del circuito que estoy haciendo en los últimos años, al menos para mí, en el kilómetro tres adelanté a mi admirado José Moratinos, al que saludé con una leve palmadita en la espalda y de la que mas tarde me arrepentí, ya que observe que no fui yo solo el que lo hizo por lo que podría resultado molesto a pesar de que la intención de todos es la de animarle, se me antoja que podría perfectamente hacerlo él con bastantes de nosotros, también me adelantó y saludó mi amigo Pascual Martínez con otro compañero de su club La Marina, mas tarde y cuando mas absorto estaba en la audición de mi MP3 y sobre el kilómetro 14 se puso a mi altura mi buen amigo Alberto, con su inseparable sombrilla,  al que le costó Dios y ayuda que respondiera a su saludo, ya que como he dicho estaba oyendo música, me pasó como una bala y le perdí de vista en poco tiempo, quise hacerle una pregunta técnica, pero no me fue posible, la gran cantidad de corredores no me lo permitió, para este no pasa el tiempo, me intenté poner a su altura y seguirle, pero tenía que poner un piñón mas en mi maquinaria y, opté por dejarle marchar, y fue una pena, porque en Elda corrimos juntos toda la carrera y entre bromas y chascarrillos como en él es costumbre me divertí bastante, más tarde y una vez acabada la prueba tuve la oportunidad de saludarle mas tranquilamente junto a su esposa Maite, y me llevé una sorpresa al preguntarle por su madre, ya que me comentó que había fallecido unos cuantos días atrás, me dijo que lo había colocado en su blog, pero como últimamente lo tenía bastante inactivo pues yo no la había leído, siento obviamente lo de su madre y me alegro de que vuelvan a estar entre nosotros y así se lo hice saber.

              El recorrido al parecer está perfectamente medido, mi GPS me dio una distancia de 21.095 metros e invertí un tiempo de 1 hora y 58 minutos.
             Este año no me han adelantado los payasos, algo voy ganando, ahora vendrá el amigo Eric y me pondrá que he entrado en el último cuarto del pelotón, como si lo estuviera viendo, eso tampoco me cae demasiado bién, pero que le vamos a hacer, es lo que hay.

              Me hubiese gustado ver y saludar personalmente a Héctor y Silvia que , a pesar de vivir en mi localidad no he tenido todavía el placer de estrecharles la mano, a Silvia darle dos besos, si me lo permite naturalmente jejejejejeje.

              Hice toda la carrera en solitario ya que mi escudero Gerard tenía que vender sardinas y jureles y no me acompaño en esta ocasión, lo hizo finalmente mi mujer a la que “invité” a saborear el “apañao y la gachamiga” tras una dura y paciente espera en la cola correspondiente.

              En fin, otra muesca más para el revolver y a esperar la próxima que será Catral seguramente, por lo menos inscrito ya estoy.