Hola amigos, esta carrera no
estaba prevista en mi calendario, y no estaba prevista porque para esa fecha yo
tenía un ineludible compromiso familiar que me impedía ponerme un dorsal, no
obstante a esto, por un cambio de horario a última hora me permitía asistir a
ella, pero no a la media de Elda, que era mi preferida, porque mi regreso no
sería compatible con el bautizo de mi nieta.
No la había preparado, la verdad
es que nunca se prepara una carrera de este tipo, bueno, no la preparamos los
que vamos a terminar sin más historias, no así los que tienen algo que ganar
lógicamente, no sé porque me imagino, que al igual que yo, las subidas
importantes no son del agrado de ningún popular que se precie de serlo,
jajajajaja.
Con Vicente Climent antes de comenzar.click en la foto para ampliar.
Como digo, al final asistía para acompañar
a mis compañeros del club Correbirras que residen en Alicante, los Roberto, Nan
Lidia, Martín y compañía, allí pude ver a muchos amigos, si bien no a todos los
que me hubiese apetecido, y es que la mencionada media de Elda y como no, el
maratón de Madrid se han llevado a muchos de ellos, así y todo la participación
ha sido alta, 1.114 corredores han finalizado, también tuve el placer de
coincidir y correr parte de la carrera con Vicente Climent, un nuevo amigo, y del
que me encantaría seguir compartiendo amistad.
Este Kiko, siempre en brazos de todos.click en la foto para ampliar.
El circuito, pues a una sola
vuelta de diez kilómetros por el centro de Alicante uniendo los dos castillos,
el primero, el de San Fernando, tras unas ligeras subidas se afronta de bajada,
no así el segundo, el de Santa Bárbara, que si bien también hay que afrontarlo
de bajada, lógicamente primero hay que subirlo, y para subirlo tela, telita de
la buena, 800 metros aproximadamente que se agarran pero que muy fuerte a tus
gemelos.
No son demasiadas veces las que he subido
Santa Bárbara, pero ninguna de ellas lo he podido hacer sin tener que echar
aunque fuese unos instantes pié a tierra, es decir, he tenido que andar, el
resto del circuito también es duro, como todos sabéis, Alicante no es llana, y
por donde quiera que hagas el circuito tienes subidas, unas más ligeras que
otras, pero subidas tienes seguro.
Emilio y Lidia con ganas de marcheta.click en la foto para ampliar.
No son estas carreras tan cortas
las que más me apetece correr, no acabo de encontrarme a gusto, prefiero las largas,
de medias en adelante, ahí sí que pongo mi marchita y sufro menos.
La salida, puntual junto a la
puerta principal del estadio Rico Pérez, tras unas como he dicho subidas no muy
importantes, se afronta la bajada hacia el centro de la ciudad, un kilómetro de
relax, una subida que se atraganta bastante en las inmediaciones de la subida
al castillo, junto al parque de bomberos y tras un ligero respiro, ale, a subir
las durísimas rampas que te llevan a la entrada principal por un circuito
serpenteante, la bajada es rápida por narices, en ese momento ya ves caras de
sufrimiento, de mucho sufrimiento en algunos corredores que están subiendo, algunos
de ellos andando, los primeros, lógicamente ya han bajado como tiros, para
ellos no existe el dolor, o por lo menos no lo exteriorizan.
Las piernas ya pesaban un poco.click en la foto para ampliar.
El tiempo anunciaba lluvia para
la carrera, pero el día ha salido precioso, soleado y caluroso, bueno precioso
para mí, que no me gusta el frío, lógicamente hay gustos para todos.
La última parte de la carrera
también es de subida, una subida constante de dos kilómetros que se atraganta
mucho nos lleva al estadio de atletismo que es donde finaliza la carrera, pero
antes hay que subir la Rambla que se atraganta un poquito también.
Mi carrera, pues buena en
términos generales, al principio salí con Lidia y Nan bastante conservador, en
la primera cuestecilla se quedan un poquito y yo pongo un ritmito con el que
intento no tener que andar, las primeras rampas de subida del castillo me
cuestan, pero no me sientan tan mal como esperaba, según voy subiendo voy
regulando y poco a poco voy viendo el final, ya no voy a parar, sufro, pero
llego corriendo por primera vez.
El resto, ya es historia, los dos
últimos kilómetros, como dije, son duros también, en ellos se me une Vicente
Climent, al que me crucé cuando yo bajaba el castillo y el subía, lo que indica
que la segunda parte de la carrera la ha hecho muy, pero que muy bien, y juntos
ya hemos llegado al final, estoy seguro que hubiese sufrido menos en la media
de Elda, al final 57’ 12’’ tiempo real, y del que no me puedo quejar.
La bolsa del corredor, pues
lógicamente pobre, es una carrera gratuita, solo había que aportar un kilo de
alimentos no perecederos y por lo tanto la bolsa no podía ser generosa, un
pastelito, un plátano y un botellita de agua.
Destacar el triste y poco cívico comportamiento
de algunos conductores alicantinos, que no acaban de entender, y
desgraciadamente no es la primera vez que lo veo, que los deportistas también
tenemos derecho a las calles alicantinas, he presenciado varias discusiones con
policías locales que les indicaban otro itinerario alternativo, ¡¡¡ cuánto
tenemos que aprender de nuestros vecinos ilicitanos en este aspecto!!! Allí se
echa la gente a la calle para animar, y aquí se discute con quién corta el
tráfico.
Mi próximo reto será Dios
mediante el próximo sábado día 2, mi buen amigo Alberto el sombrilla me ha
“invitado” a una trotada, que de momento se me antoja dura, pero que voy a
afrontar con toda la ilusión del mundo, de Elche a la Font Roja (Alcoy)
tendremos que correr algunos amigos y amigas antes de degustar una amigable
comida en la ciudad montañera.
Quiero pediros disculpas por que
algunas fotos no están del todo nítidas y es que el desenfoque del sol y la
sombra continuo no me ha dejado tranquilo.
Foto de la semana.-
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