Ya estoy aquiiiiiiiiiiiiiiiii

              Bueno, pues ya he regresado de mi periplo italiano, he venido para que negarlo un poco decepcionado, no por supuesto de lo que he visto, que ha sido todo muy interesante, he venido decepcionado por el trato que he observado hacia los turistas en general por parte de los italianos, tienen, sobre todo los que trabajan en el sector servicios un trato que raya en lo inaceptable, y como el blog es mío y pongo lo que quiero, pues los voy a criticar porque me da la gana, no tienen respeto hacia nadie, ni jóvenes ni viejos, los hoteles son de lo peor que yo he podido ver en mis viajes, no corresponden para nada las estrellas de sus fachadas con el interior de los mismos ni por supuesto con el trato hacia el turista, que en definitiva es quién les da de comer, la suerte que tienen es que el grandioso patrimonio cultural que poseen es la gallina de los huevos de oro y los turistas, por mucho que se les advierta seguirán visitando el país, los precios son desorbitados, una cervecita, cinco euros, una botellita de agua de las que nos ponen a nosotros en los avituallamientos, tres euros, una meadita ochenta céntimos, así todo.

              Ni en mi odiada “mili” me he sentido tan mal tratado.

              Desde primero de año han colocado en los hoteles un impuesto que se han sacado de la manga, por el que después de pagar la estancia, tienes que pagar tres euros por persona y día, por pernoctar, si habéis leído bien, por pernoctar, nadie sabe exactamente que es, pero hay que pagarlo en todos los hoteles, por lo de la crisis, ya sabéis.

Dos señales de tráfico que todavía estoy intentando descifrar.

Con el utilitario que he utilizado durante las vacaciones

En el Vaticano

Y en Milán.

              Lo que ocurre es que hay tantas cosas por ver, que al final del viaje te intentas quedar con lo mejor e intentas pasar página, que es lo que voy a hacer yo a partir de este preciso instante.

              Y para resarcirme de todo me he ido a correr hoy 12 Kilómetros a un trote cochinero para intentar bajar los dos kilitos que me he traído del mismo, estaré así durante toda la semana y para el domingo a Campello, a comenzar de nuevo con el día a día, menos mal que me quedan aún algunos días de vacaciones y podré descansar del viaje, si habéis leído bien, intentaré descansar del viaje.

              Os veo Dios mediante el próximo domingo.