Bueno
amigos, pues ya está finalizada mi maratón nº 10, maratón celebrada en la
localidad de Ciudad Real el pasado domingo.
Tenía
unas dudas tremendas con respecto a esta carrera, y tenía dudas porque mi
estado físico no me permitía afrontarla con garantías, no solo con garantías de
buena marca, no estaba seguro ni de acabarla en el tiempo que la organización
establece.
Desde la
carrera de Pins i Mar del pasado 20 de septiembre la espalda me ha estado
martirizando, me ha estado, y aún sigue haciéndolo, el pasado día 4 ya tuve que
dejar pasar la media de Alicante por el tremendo dolor de mis L 1 y L 2 (
lumbares ) y he estado sin correr ni entrenar por este motivo, así pues las
perspectivas eran muy negras.
Los corredores, sobre todo a los que
nos gustan las distancias más o menos importantes tenemos una terrible
enfermedad que no es otra que la “carreritis” y siempre esperamos, fijaos si
somos inocentes, que corriendo se nos pasen los males, “el resfriado no te
preocupes que se te pasa con cuatro sudores” “ si tienes molestias sal a trotar
un poco sin forzar” “no se te ocurra pararte que luego es peor”, quién no ha
dicho, o ha oído muchas veces estas frases, pues eso, que todo lo arreglamos
corriendo, y con estas premisas cambié de comunidad autónoma para reparar mi
espalda, y es que una maratón no se puede dejar pasar de largo así como así,
son carreras que tienen un lugar preferente dentro de nuestro calendario.
Salía el
sábado hacia Ciudad Real teniendo como compañeros de viaje a Roberto y Nan con su incipiente barriguita, desde su
Murcia querida salían Oskar, Mariajo, Ventura con Mari Carmen y Ninja con su
esposa Pepi, ellos se unirían a nosotros en La Roda y a partir de ese punto ya el
viaje sería en grupo, tras una comida típica recogimos los dorsales a primera
hora de la tarde. Bueno, si os parece voy, llegado a este punto diseccionar la
carrera, la organización, y el viaje, ya que son puntos totalmente antagónicos a
mi forma de entender, el viaje y la compañía ha sido una experiencia genial,
los compañeros de viaje han sido una pasada, a Ninja no lo conocía
personalmente, bueno hemos coincidido en carreras pero no había la suficiente
amistad, solo el saludo típico de compañeros de equipo, me he llevado una buena
impresión de él, lo mismo me sucedía con Ventura, tampoco le conocía
personalmente, y he visto que es un tío que merece mucho la pena, al resto no
los nombraré, ya que tanto Roberto como Oskar son personas muy apreciadas por mí,
de las mujeres ya me guardaré muy mucho de efectuar algún juicio, eso puede ser
un arma de doble filo, jajajaja, la edad me ha enseñado que jamás se debe
juzgar a una mujer, y menos a la de uno, jajajaja.
Bueno, pues
tras este apartado y apostillando que con ellos lo pasé genial redirijo mi
escritura hacia la carrera, esta también merece ser separada, por una parte la
parte organizativa y por otra la deportiva propiamente dicha.
Recogíamos
el dorsal como antes mencionaba a primera hora de la tarde, la entrega fue en
un pequeño despacho en el que ni siquiera había un folio colgado que indicase
en qué cola deberíamos colocarlos ya que conjuntamente con el maratón, se
corría la media y otra de 10 kilómetros, lógicamente y aplicando la tan famosa
ley de Murphy nos colocamos en la fila equivocada, era lo lógico, de nuevo al
final de la cola, no había listado para comprobar el nº de dorsal, nos lo
entregan tras comprobar nuestra
identidad y nos envían a otro sitio diferente a recoger la bolsa del corredor,
este sitio ya era un poquito más espacioso, pero solo un poquito, carencia
total y absoluta de feria del corredor, ¿Qué es eso de feria del corredor?
deberían de pensar los organizadores, nada de nada, recogemos la bolsa que
contiene, una bonita camiseta, un polo aún más bonito de manga corta, un buf
alusivo de la prueba, un pequeño y también bonito trofeo conmemorativo con la
figura del Quijote, una cuña de queso y una mínima botellita de aceite, buena
bolsa, como veréis se entrelazan, siempre a mi juicio, aciertos y fallos.
El hecho
de decidirme por esta maratón fue la gran estima que le tenía Nan, me había
dicho en muchas ocasiones que era una de sus maratones preferidas, y ella ya
lleva unas cuantas y en muchísimos lugares diferentes, pero había una pequeña
duda, el recorrido este año había cambiado y habría que descubrir si para bien
o para mal, más tarde os desvelaré esto.
Toda la
tarde estuvo lloviendo, hacía un fresquete ligerito, pero que unido a la lluvia
hacía que tuvieran éxito la multitud de castañeras que había por los
alrededores, el hotel, menos Ventura, que lo tenía en el centro centrísimo de
Ciudad Real, lo teníamos a escasos 400 metros de la salida, eso estaba muy bien,
podríamos recrearnos antes de la salida y hacerla si el frio hacía su aparición,
a ultimísima hora, pero la duda estaba en si nos calaríamos, no es lo mismo
correr una pequeña prueba mojándote, que un maratón, mi espalda estuvo todo el
día totalmente anestesiada a base de calmantes de todo tipo, solo tendría que
seguir aplicando la misma táctica al día siguiente y esperar que todo rodase más o menos bién.
Roberto
era otro que también tuvo sus dudas con respecto a su participación hasta
última hora, y cuando digo última hora digo el día anterior, una importante
contractura en la espalda no le dejaba bracear, Ventura, también estaba recién
salido de una intervención quirúrgica ¡¡ vaya equipo que habíamos reunido!!
A lo
largo de la tarde, la noche, y primera hora de la mañana eran constantes los
mensajes entre nosotros a través del whatsapp controlando las variaciones del
clima que había en la aplicación del móvil.
La
lluvia, que no cesé en toda la noche,
dejó paso a una mañana fresquita, nublada, pero con algún claro a lo lejos que
nos hacía albergar esperanzas de no mojarnos, salimos a última hora del hotel
para evitar el frio, la mañana estaba mejorando, la nubes eran menos plomizas,
el speaker nos saluda intentando animarnos con la célebre frase que dedicaban
los gladiadores al Cesar “maratonianos, los que van a morir te saludan” nos
comunican también que la prueba está homologada ya que es valedera para el
campeonato regional de maratón de castilla la mancha, y a fe que era cierto, ¡¡
cuántos cienes y cienes de jueces nos encontramos a lo largo del recorrido!!
Todos muy metidos en su tarea hasta el punto de descalificar a algún corredor.
La prueba
comenzó puntualmente, la salida conjunta lógicamente, el monto total de
corredores de las tres pruebas rebasaba mínimamente el millar, dos vueltas a un
idéntico recorrido, Ninja, Oskar y Ventura se adelantan un poco en la salida,
Roberto, que decide cuidar su establo se queda conmigo, a un ritmo inadecuado
en condiciones normales para él, a mí me viene perfecto, mi espalda está
totalmente dopada y por lo menos mientras pueda aguantarlo será una gratísima
compañía, nos planteamos no rebasar, al menos de momento los seis minutos por
kilómetro y vamos cumpliéndolo escrupulosamente, yo voy de estreno por partida
doble, en primer lugar mi segundo par de zapatillas Hoka, one one, que tras el estrepitoso
fracaso de las primeras van a darme una prueba de si realmente son buenas para
mí, solo las he usado 40 kilómetros y espero que no me produzcan rozaduras, por
otra parte estreno nuevo GPS, el 305 que me queda con algo de vida de los dos
que poseo me falla de vez en cuando y he incorporado a la plantilla un flamante
310 que recibí el viernes, decido llevarlos los dos como si fuese un
paracaidista por si falla el primero, o en su caso comparar los valores que me
marcan ambos.
Arco de salida.click en la foto para ampliar.
El
recorrido no es agradable al comienzo, demasiado giro y demasiado polígono, esperamos
que se arregle poco a poco y vayamos viendo algo de “civilización” solo a la
altura del km. 9 aproximadamente hacemos una pequeña entrada por la ciudad de
poco más de un kilómetro y de nuevo para las afueras, entonces nos damos cuenta
de que va a ser una carrera sosa en cuanto a público, así y todo comprobamos
como el tráfico está totalmente abierto, los policías locales intentan sacar el
tráfico de la impaciente masa de conductores entre corredor y corredor en los
cruces y rotondas cuando el espacio entre ambos se lo permite con muchísimo
riesgo para los mismos y la consiguiente responsabilidad por parte de los agentes de tráfico.
Roberto,
me pregunta constantemente como voy a la vez que me hace saber su estado como
si elaboráramos constantes partes de guerra, voy, que no es poco, él a pesar de
su dolor me marca un ritmo que difícilmente puedo seguir cuando alcanzamos la
media maratón, 2 05’ marca el crono cuando rebasamos la
media maratón, mi falta de entrenamiento me va a pasar factura y lo sé, jamás
he pasado la media en ese tiempo corriendo un maratón, hemos dado una vuelta a
un recorrido soso e insulso, feo no, lo siguiente, y aún nos queda otra, en el
kilómetro 28 tomo mi segundo gel en un intento de no perder su ritmo, pero ya
mi espalda me está recordando que también existe, no sé si sorprendentemente o
no, mis pies me molestan, no sé lo que me pasa pero no voy cómodo los empeines
y algunos dedos me molestan extrañamente, jamás me ha ocurrido, ya los revisaré
al final.
Al paso
por el km. 30 nos salen al encuentro las mujeres, Nan, Mariajo y compañía con
unas cervecitas frías y unas tapas de tortilla, no me lo puedo creer, esta
gente es la caña, nunca mejor dicho, me ofrecen una fresquita cerveza sin
alcohol, que son las que yo bebo y la tapa de tortilla o queso, lo que
queramos, Roberto decide parar y clavarse la ofrenda, yo no tengo el “chichi pa
rulos” y declino el ofrecimiento, jamás he tomado nada que no sean geles en
carrera y no sé cómo me va a venir el “tapeo”, desde estas líneas quiero
pedirles disculpas por no aceptarlo y a la vez agradecerles el bonito gesto.
Yo sigo
corriendo, algo antes del km 31 me vuelve a alcanzar Roberto tras salir de “la
cantina” y es entonces cuando le pido por favor que se marche delante, no soy
capaz de seguir su ritmo y creo que lo estoy fastidiando a él.
A partir
de ese momento regulo un poquito, me coloco el MP3 que hasta ese punto no lo
había utilizado y miro el tiempo que llevo, es entonces cuando me doy cuenta
que el nuevo 310 me marca casi 200 metros más que el antiguo 305, no me lo
puedo creer y entonces pienso en Eric, que en su página web no incluye ni
contabiliza las carreras en las que dos o más de sus participantes le hayan
comunicado tiempos diferentes en sus GPS, no las da por válidas, no me quiero
imaginar si mirásemos todos los relojes de los corredores la disparidad de
tiempos que nos saldrían.
Solo me
quedan 11 kilómetros y ya sé que acabaré, de la forma que sea acabo, pero no
voy bien, ya he dicho en otras ocasiones que el maratón pone a cada cual en su
lugar, la falta de entreno se paga, y se paga con sufrimiento, menos mal que
los voluntarios, y esto quiero destacarlo eran una auténtica pasada y desde
aquí les felicito, todos, absolutamente todos aplaudían a los corredores a su
paso y a los que íbamos rezagados con más motivo, hasta la policía local
sorprendentemente lo hacía, en los puntos alejados donde no tenían mucho
tráfico y por ende mucho trabajo, nos animaban también.
A partir
del medio maratón la participación mermó de tal manera que la distancia entre
corredores era muy elevada sobre todo a mi altura, ya no estaban los que corrían
esa distancia, ni tampoco lógicamente los del 10.000 y ya quedábamos “cuatro
gatos”.
Esto no era el centro de la ciudad precisamente.click en la foto para ampliar.
Los
últimos 8 kilómetros fueron duros, entre la espalda, la falta de fuerzas y los pies,
fueron duros, al final 4 horas 30 minutos exactos marcaba el crono a mi entrada
en meta, una bonita medalla de finisher y una bolsa con algunas viandas y
líquidos reparadores, ducha y camino de vuelta.
Los
extraños dolores de los pies, pues resulta que este tipo de zapatillas son muy
altas de caña y al ser tan nuevas me fueron rozando las lengüetas que son algo
rígidas y me produjeron dos fuertes rozaduras en los empeines que me estaban
sangrando y numeras ampollas en la parte superior de algunos dedos, cosa que
jamás me había sucedido, pero como dije anteriormente, el correr veintitantos
kilómetro con esas rozaduras y ampollas y no pararte solo es comparable con lo
que deben de pasar las señoritas que no saben usar tacones y se empeñan en
hacerlo.
Al final
el agua nos respetó y solo unas cuantas gotas poco después de rebasar la media
maratón fue todo el bagaje lluvioso que recibimos durante la carrera, a la
finalización y cuando ya estábamos de regreso al hotel comenzó a apretar un
poquito mas.
La
valoración final, pues es extraña, la organización buena, avituallamientos cada
dos o tres kilómetros aproximadamente aunque en pocos había sólido, muchísimos
voluntarios en todos y cada uno de los cruces, el público animando sin cesar en
los sitios en que había, la bolsa del corredor bastante aceptable, sin feria del
corredor, el recorrido soso hasta decir basta, si este nuevo recorrido mejora
el anterior, apaga y vámonos, la entrada a meta consistía en un goteo insulso
de corredores, creo que no volveré, ya he corrido en esta ciudad, y a otra cosa
mariposa, es un maratón para las personas que vivan aceptablemente cerca de
Ciudad Real, pero no para clavarte cuatro horas de carretera.
Fotos, pues
no hay muchas, los pocos participantes que corrían en mis tiempos y la poca
repercusión que tendrían entre los corredores de esa parte del país influyeron
en ello, no obstante hay algunas fotos cedidas por Nan.
Ahora, el
próximo domingo a la Foia, la carrera que une las poblaciones de Ibi, Castalla
y Onil, 28 kilómetros que espero acabar decentemente.
Foto de la carrera.-
No lo
conocía suficientemente, pero en solo una carrera ya he podido comprobar que
Ventura es un tío que merece mucho la pena, es un buén corredor y una excelente
persona, solo por eso ya se merece mi total reconocimiento.click en la foto
para ampliar.
Bueno pues otra que no te cuentan jeje. Un saludico.
ResponderEliminarJosé Vicente estas hecho un CAMPEON a pesar de todo sufriendo y aguantando cumpliste el objetivo de llegar a la Meta que es lo que realmente interesa y otra mas para la saca, nos vemos en dos siesta en otra linea de salida, de un maratón cuidate y para adelante.
ResponderEliminarUn saludo y un fuerte abrazo.
Santiago
J.V. Otra más que tienes, el volver o no volver "qui sá" lo importante es haber hasado un buen fin de semana y haber terminado la carrera, y con todo los problemas que tenías.
ResponderEliminarNos vemos
Vaya tiempo ridiculo, la hiciste andando?
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